Pessebre vivent de Castell d'Aro Castell - Platja d'Aro

El Pesebre Viviente de Castell d'Aro es un pesebre llevado a cabo por mosén Gumersind en 1959, el cual declaró en sus memorias que se inspiró en el Belén Viviente de Engordany (Andorra) creado por Esteve Albert.

Todo empezó una tarde mientras se celebraba la reunión para organizar la Misa del Gallo de Castell d'Aro. El cura trasladó a la juventud del pueblo la idea de crear una escena del Pesebre Viviente a la salida de la misa. Los chicos y chicas aceptaron la propuesta rápidamente, ya que les hizo mucha ilusión poder llevar a cabo ese proyecto en el municipio.

Ese mismo año, instantes después de salir de la misa se escenificó un pequeño nacimiento situado en las ruinas del Castillo de Benedormiens, junto a la iglesia de Santa Maria.

Ante la buena acogida por parte de la gente del pueblo, al año siguiente hubo muchas más familias que se animaron y decidieron empezar a colaborar. Por este mismo motivo, se amplió el recorrido, cada año una parte, hasta la fecha, donde todo el casco antiguo del pueblo está cubierto de escenas.

Cuando ya hacía ocho años de pesebre, Mossèn Gumersind dejó la parroquia de Castell d'Aro y otorgó la responsabilidad de dirigirlo a Mossèn Agustí Vila que durante más de 30 años estuvo en lo más alto del proyecto. En 2004 se creó la Asociación del Belén Viviente, y se inició una nueva etapa de su historia.

El día 23 de abril de 2011, Castell d'Aro recibió la Cruz de Sant Jordi de manos de la Generalitat de Catalunya, por su gran labor en el Belén Viviente. Este hecho aportó una gran ilusión a todas las personas que de algún modo estaban y siguen estando implicadas. Recibir la Cruz de Sant Jordi, no sólo significaba una gran victoria, sino que fue el sentimiento de buen trabajo para todos los participantes.